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Su curiosidad los llevo más allá. Unos jóvenes estudiantes del 4to año de secundaria del colegio Isaac Newton de Huánuco descubrieron de forma casual que la larva del gusano de la harina tiene nada menos que predilección por el tecnopor. Así nos lo cuenta Perla Miraval Cano quien lo comprobó en la casa de su abuela que solía almacenar productos comestibles en este material.
El proyecto escolar "LA EVALUACIÓN DEL EFECTO BIODEGRADABLE DEL TENEBRIO MONITOR O GUSANO DE HARINA EN EL POLIETSTIRENORESIDUO DE TECNOPOR ", los llevo a ganar el primer puesto en su natal Huánuco y también les permitirá representar al Perú en Estados Unidos.
Fue durante un mes que Fabriscio Cámara Caldas y su compañera de estudios comprobaron el comportamiento de este particular gusano que suele vivir tan solo 3 meses.
Ellos hoy se muestran orgullosos de sus primeros logros y sobretodo de representar al país en el extranjero. Además aseguran que gracias a los gusanos de harina se podrá reducir en gran medida la contaminación, esto porque la degradación del tecnopor demora más de 500 años y es junto al plástico el más grande contaminante de la tierra.
Fuente: Latina
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