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La ciudad de Huánuco nos entrega uno de sus hijos más predilectos, se trata de Gustavo Ratto, joven revelación que se afirma sobre el escenario nacional de la música andina contemporánea. Poseedor de un gran talento lirico y de una imagen cosmopolita, Gustavo Ratto nos entrega “La Noche”, un soneto compuesto a base de trasnoches y desamores que ya resuena en las radios y se traduce como el soundtrack de sus propios días.
Cantor a tiempo completo y letrista intimo sin feriados ni horarios, Gustavo empezó a cantar cuando era niño, descubrió placeres en el arte cuando ya era un adolescente y, entre las rancheras, la canción romántica y el rockanroll de bares barranquinos, encontró su camino en el redescubrimiento de la música de aquellos amaneceres en su Huánuco querido, de la música que remueve sus raíces andinas que hoy nos presenta.
Producido por Mino Mele, quizá el productor musical más laboratorista de nuestro país, el disco de Gustavo Ratto que, precisamente se llama “La Noche”, contó con la participación de instrumentistas como Riber Oré en las guitarras, Percy Rojas en los charangos, Rolando Vento en el bajo, Juistin Quiroa en los teclados, Francisco Ancco en los vientos, Hernán Felipa en la percusión y Mino Mele en la batería.
Sobre la síntesis de “La Noche”, Gustavo Ratto nos cuenta; “esta canción la compuse mirando las estrellas del cielo huanuqueño una noche en la que no podía dormir. Recordé una historia, de esas sobre el desamor y la traición”… La obra de Gustavo Ratto se proyecta como una propuesta musical neo andina contemporánea, con una nueva sonoridad llena de mística, energía, frescura y gran tinte juvenil. Gustavo Ratto es una nueva voz que ingresa al circuito musical con evidente proyección camino a la consagración.
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