orcid.org/0000-0002-3573-5424
Homenaje a los padres verdaderamente humanos
Mg. Amarilis Domínguez Palpa
SIEMPRE CONTIGO HIJO MÍO
La vida en el planeta desde la época de las cavernas hasta el presente siglo XXI, construyó el esquema de maternidad y paternidad juntas. Actualmente nuestra sociedad es más compleja, pero el rol de los padres –papás- continúa siendo muy importante. Qué emocionante y tierno cuando el padre está desde antes de la concepción construyendo un plan estratégico para que responsablemente sepa en quien y con quién construir la vida, dejar sus semillas no regadas por doquier… proyecte una descendencia responsable y emprendedora a prueba de todo. No hay pretextos ni justificación que valga si no estuvo presente en los mejores momentos después de la fecundación… la vida sigue su curso… los niños nacen, crecen, se desarrollan, se hacen jóvenes y adultos… no esperan la presencia ni ausencia de los progenitores, por ello esos años maravillosos son únicos, la edad de oro de los hijos no volverán jamás… cada llanto, risa, balbuceo, las canciones de cuna, sus primeras palabras, sus primeros pasos, son maravillosos… ni las fotografías ni videos podrán reemplazar las experiencias vividas con los hijos…no saben lo que se pierden los padres ausentes.
Nuestros padres que nos dieron la fortaleza de caminar y levantarnos ante cualquier caída cuando éramos niños, nos tuvieron en sus brazos, combinaban el trabajo con su presencia y esencia, dejaron huellas y ejemplos en nuestra vida… nos encaminaron a la escuela y a la universidad de la vida, nos contaban sus historias y nos acercaban a la cultura, esa sabiduría de papá que complementaba con la ternura y amor de nuestra madre.
La historia de un padre es la historia de la humanidad, de la cultura, la sabiduría que no sólo viene a través de la herencia genética, quizá lo más valioso sea la herencia cultural que nos supo compartir. Detrás de unos buenos hijos los hay también grandes padres.
Como refiere Neil I. Bernstein “A diferencia del pasado, hoy se espera que los padres estén involucrados en la vida de los niños, que expresen sus sentimientos, que concilien trabajo y familia: que sean superpapás. Ellos se esfuerzan más que nunca e intentan compartir la crianza a partes iguales, pero a muchos les abruma la culpa de no estar construyendo la relación que se prometieron tener con sus hijos”. Recomendamos leer el libro del autor “Siempre contigo: cómo ser un padre accesible, involucrado y vinculado con tu hijo“
¡NO ESPEREN EL ADN, ASUMAN SU RESPONSABILIDAD!
Qué vergüenza, que inhumano que algunos padres desalmados pretexten una prueba de ADN para asumir su paternidad, o se les exija por derecho del hijo firmar una partida de nacimiento, que cobardía más absurda. Algunas sociedades avanzadas han optado por darle la autoridad a la madre de asumir la identidad total de su hijo y hasta puede justificarse por ello la maternidad y la soltería juntas.
Lo más importante es la paternidad que se asume al margen de las dudas y debilidades, el hombre se hace más hombre en la medida en que asume retos y desafíos, y no se corre cuando tiene que trabajar por la leche, los pañales y los alimentos, y no se colude con jueces corruptos a fin de librarse de la pensión por alimentos, o se hace la víctima y plantea mil excusas a fin de no asumir su rol como padre. La paternidad es de valientes al margen de la relación con la pareja y el matrimonio.
Negar al hijo es negarse a sí mismo, no aceptar que su vida puede continuar porque la humanidad le ha encargado – y escúchenlo bien- la gran misión de continuar la descendencia y la transmisión de la cultura pase lo que pase, porque vivimos sólo una vez.
Como decía Nikolai Ostrovski en su famosa obra ASÍ SE TEMPLO EL ACERO:
"Lo más valioso que un hombre posee es la vida. Se le da a él sólo una vez y por ello debe aprovecharla de manera que los años vividos no le pesen, que la vergüenza de un pasado miserable y mezquino no le queme y que muriendo pueda decir: he consagrado toda mi vida y todas mis fuerzas a lo más hermoso en el mundo, a la lucha por la liberación de la humanidad...".
GRATITUD ETERNA A LOS PADRES EJEMPLARES
Padre es el que cría y no solamente el que engendra lo decían los sabios, y eso es verdad… hay de los hijos que en su caminar encontraron el calor de un padre: en su abuelo, tío, hermano mayor o tutor en enhorabuena que siempre habrá una mano fraterna que cobije a un hijo o hija sediento de amor paternal…
Padres verdaderos y fraternos a ustedes este gran homenaje, que vivan por siempre, quienes no se esquivan ante la presencia y necesidades no sólo materiales de sus hijos. Ustedes que dejaron su sello implacable en la mente y el corazón de sus hijos e hijas que vivan eternamente, que el tiempo se detenga infinitamente, porque sus semillas no fueron dadas en vano y la ternura masculina que suena poco común, también templo la vida de muchos hombres y mujeres de bien.
Un especial homenaje a mi padre, mis hermanos y amigos que son padres ejemplares y a los que mañana asumirán con alegría y entusiasmo su paternidad y no serán sólo seres biológicos que expulsan semillas al viento.
GRATITUD ETERNA
A mi padre: el papágrande Vedoco por siempre.
De la mano me llevabas por los caminos de la vida
Contigo conocí los campos, los ríos y las montañas
Tu agenda laboral y hasta política nos incluía…
Recuerdo que me enseñaste a escribir, a leer tu gran biblioteca
Tus poemas, relatos y ensayos…
Compaginábamos plaquetas y boletines literarios…
La cultura y las verdades que forjaste en mí
Son un legado que ahora me da fortaleza
Para enfrentar los desafíos de la vida y del trabajo
Y emprender mi propia hoja de vida.
Nunca estuviste enojado ni distante
Fuiste el padre perfecto,
Incluso cuando te hiciste un gran abuelo…
Ahora vivo del manantial de tus consejos,
Orgullosa de tu sabia filosofía e identidad con nuestra cultura.
Que la pachamama espere siempre tus caminatas
Y que tu sabiduría esté vigente,
Que los jirkas y el wayraviento te protejan eternamente
Y sólo me queda continuar tus pasos…
Ese es mi mayor compromiso.
¡Gracias padre por ser mi primer maestro!.
Amarilisiempre
Mg. Amarilis Domínguez Palpa
SIEMPRE CONTIGO HIJO MÍO
La vida en el planeta desde la época de las cavernas hasta el presente siglo XXI, construyó el esquema de maternidad y paternidad juntas. Actualmente nuestra sociedad es más compleja, pero el rol de los padres –papás- continúa siendo muy importante. Qué emocionante y tierno cuando el padre está desde antes de la concepción construyendo un plan estratégico para que responsablemente sepa en quien y con quién construir la vida, dejar sus semillas no regadas por doquier… proyecte una descendencia responsable y emprendedora a prueba de todo. No hay pretextos ni justificación que valga si no estuvo presente en los mejores momentos después de la fecundación… la vida sigue su curso… los niños nacen, crecen, se desarrollan, se hacen jóvenes y adultos… no esperan la presencia ni ausencia de los progenitores, por ello esos años maravillosos son únicos, la edad de oro de los hijos no volverán jamás… cada llanto, risa, balbuceo, las canciones de cuna, sus primeras palabras, sus primeros pasos, son maravillosos… ni las fotografías ni videos podrán reemplazar las experiencias vividas con los hijos…no saben lo que se pierden los padres ausentes.
Nuestros padres que nos dieron la fortaleza de caminar y levantarnos ante cualquier caída cuando éramos niños, nos tuvieron en sus brazos, combinaban el trabajo con su presencia y esencia, dejaron huellas y ejemplos en nuestra vida… nos encaminaron a la escuela y a la universidad de la vida, nos contaban sus historias y nos acercaban a la cultura, esa sabiduría de papá que complementaba con la ternura y amor de nuestra madre.
La historia de un padre es la historia de la humanidad, de la cultura, la sabiduría que no sólo viene a través de la herencia genética, quizá lo más valioso sea la herencia cultural que nos supo compartir. Detrás de unos buenos hijos los hay también grandes padres.
Como refiere Neil I. Bernstein “A diferencia del pasado, hoy se espera que los padres estén involucrados en la vida de los niños, que expresen sus sentimientos, que concilien trabajo y familia: que sean superpapás. Ellos se esfuerzan más que nunca e intentan compartir la crianza a partes iguales, pero a muchos les abruma la culpa de no estar construyendo la relación que se prometieron tener con sus hijos”. Recomendamos leer el libro del autor “Siempre contigo: cómo ser un padre accesible, involucrado y vinculado con tu hijo“
¡NO ESPEREN EL ADN, ASUMAN SU RESPONSABILIDAD!
Qué vergüenza, que inhumano que algunos padres desalmados pretexten una prueba de ADN para asumir su paternidad, o se les exija por derecho del hijo firmar una partida de nacimiento, que cobardía más absurda. Algunas sociedades avanzadas han optado por darle la autoridad a la madre de asumir la identidad total de su hijo y hasta puede justificarse por ello la maternidad y la soltería juntas.
Lo más importante es la paternidad que se asume al margen de las dudas y debilidades, el hombre se hace más hombre en la medida en que asume retos y desafíos, y no se corre cuando tiene que trabajar por la leche, los pañales y los alimentos, y no se colude con jueces corruptos a fin de librarse de la pensión por alimentos, o se hace la víctima y plantea mil excusas a fin de no asumir su rol como padre. La paternidad es de valientes al margen de la relación con la pareja y el matrimonio.
Negar al hijo es negarse a sí mismo, no aceptar que su vida puede continuar porque la humanidad le ha encargado – y escúchenlo bien- la gran misión de continuar la descendencia y la transmisión de la cultura pase lo que pase, porque vivimos sólo una vez.
Como decía Nikolai Ostrovski en su famosa obra ASÍ SE TEMPLO EL ACERO:
"Lo más valioso que un hombre posee es la vida. Se le da a él sólo una vez y por ello debe aprovecharla de manera que los años vividos no le pesen, que la vergüenza de un pasado miserable y mezquino no le queme y que muriendo pueda decir: he consagrado toda mi vida y todas mis fuerzas a lo más hermoso en el mundo, a la lucha por la liberación de la humanidad...".
GRATITUD ETERNA A LOS PADRES EJEMPLARES
Padre es el que cría y no solamente el que engendra lo decían los sabios, y eso es verdad… hay de los hijos que en su caminar encontraron el calor de un padre: en su abuelo, tío, hermano mayor o tutor en enhorabuena que siempre habrá una mano fraterna que cobije a un hijo o hija sediento de amor paternal…
Padres verdaderos y fraternos a ustedes este gran homenaje, que vivan por siempre, quienes no se esquivan ante la presencia y necesidades no sólo materiales de sus hijos. Ustedes que dejaron su sello implacable en la mente y el corazón de sus hijos e hijas que vivan eternamente, que el tiempo se detenga infinitamente, porque sus semillas no fueron dadas en vano y la ternura masculina que suena poco común, también templo la vida de muchos hombres y mujeres de bien.
Un especial homenaje a mi padre, mis hermanos y amigos que son padres ejemplares y a los que mañana asumirán con alegría y entusiasmo su paternidad y no serán sólo seres biológicos que expulsan semillas al viento.
GRATITUD ETERNA
A mi padre: el papágrande Vedoco por siempre.
De la mano me llevabas por los caminos de la vida
Contigo conocí los campos, los ríos y las montañas
Tu agenda laboral y hasta política nos incluía…
Recuerdo que me enseñaste a escribir, a leer tu gran biblioteca
Tus poemas, relatos y ensayos…
Compaginábamos plaquetas y boletines literarios…
La cultura y las verdades que forjaste en mí
Son un legado que ahora me da fortaleza
Para enfrentar los desafíos de la vida y del trabajo
Y emprender mi propia hoja de vida.
Nunca estuviste enojado ni distante
Fuiste el padre perfecto,
Incluso cuando te hiciste un gran abuelo…
Ahora vivo del manantial de tus consejos,
Orgullosa de tu sabia filosofía e identidad con nuestra cultura.
Que la pachamama espere siempre tus caminatas
Y que tu sabiduría esté vigente,
Que los jirkas y el wayraviento te protejan eternamente
Y sólo me queda continuar tus pasos…
Ese es mi mayor compromiso.
¡Gracias padre por ser mi primer maestro!.
Amarilisiempre
0 comentarios:
Publicar un comentario